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Ateísmo

El ateísmo es el rechazo a la creencia en la existencia de uno o más dioses. En sentido estricto, es la postura en la que no existe ningún dios. Por extensión, es la ausencia de creencia en que exista algún dios. Se opone al teísmo, que en su forma más general afirma la existencia de al menos una deidad.
El término ateo etimológicamente deriva del latín athĕus y este del griego ἄθεος, que significa ‘sin dios(es) ’, y fue empleado de forma peyorativa para referirse a quienes rechazaban a los dioses adorados por su sociedad. Con el surgimiento y la difusión del librepensamiento, el escepticismo científico y el subsecuente incremento de la crítica de la religión, disminuyó el alcance del término. Las primeras personas en identificarse a sí mismas con la palabra «ateo» vivieron en el siglo XVIII. Algunas religiones antiguas y modernas son denominadas ateas, ya que o no tienen el concepto de deidad o niegan la existencia de una deidad creadora, aunque aún veneran a otras entidades divinas.

Los argumentos a favor del ateísmo abarcan desde aspectos filosóficos a perspectivas sociales e históricas. Las razones para no creer en ninguna deidad sobrenatural incluyen la falta de evidencia empírica, el problema del mal, el argumento de las revelaciones inconsistentes, el rechazo a conceptos in-falsables y el argumento de la no creencia, entre otros. Si bien algunos ateos han adoptado filosofías seculares, no existe una ideología o un sistema moral único a la que todos los ateos adhieran. Muchos de ellos sostienen que el ateísmo es una cosmovisión más parsimoniosa que el teísmo y que por tanto la carga de la prueba no recae en quien no cree en la existencia de dioses, sino que es el creyente quien debe justificar su teísmo.

Dado que las nociones de ateísmo varían, determinar cuántos ateos existen en el globo es una tarea compleja. Según una estimación hecha en 2007, los ateos representaban el 2,3 % de la población mundial, además de un 11,9 % de no religiosos (ateos no incluidos).

Atheists Agnostics Zuckerman en
Porcentaje de ateos y agnósticos en el mundo

Una encuesta de WIN/GIA de 2012 preguntó “¿Independientemente de si asistes a un lugar de culto o no, dirías que eres una persona religiosa, no religiosa o un ateo convencido? ”.
El 59 % de la población mundial se identificó como religiosa, un 23 % no religiosa y un 13 % se declaró atea convencida. Los ateos están concentrados principalmente en Asia Oriental, especialmente China (47 %) y Japón (31 %), y en Europa Occidental (en promedio 14 %), donde sobresale Francia (29 %).
En comparación con el mismo estudio realizado en 2005, en siete años la religiosidad disminuyó nueve puntos porcentuales mientras que los ateos aumentaron tres en los países en común.

Implícito vs. Explícito

Las definiciones de ateísmo varían según el grado de reflexión que una persona debe tener respecto a los dioses para ser considerada atea. Algunas definiciones incluyen a la simple ausencia de creencia en que algún dios exista. Esta definición extensa incluiría a los recién nacidos y aquellas personas que no han sido expuestas a ideas teístas. Ya en 1772, Baron d'Holbach dijo que “Todos los niños nacen ateos; no tienen ni idea de Dios”.

Similarmente, George H. Smith (1979) sugirió que: “El hombre que no conoce al teísmo es un ateo porque no cree en un dios. Esta categoría también incluiría al niño que tiene la capacidad conceptual para aprender los problemas implicados, pero que aún no es consciente de ellos. El hecho de que este niño no crea en un dios lo califica como ateo». Smith acuñó el término ateísmo implícito para referir a «la ausencia de creencia teísta sin un rechazo consciente” y ateísmo explícito para la definición más común de la incredulidad consciente. Ernest Nagel contradice la definición de Smith como simple “ausencia de teísmo”, reconociendo solo el ateísmo explícito como el verdadero “ateísmo”.

AteísmoImplícitoExplícito
Diagrama que muestra las relaciones entre las definiciones entre el ateísmo débil/fuerte e implícito/explícito. Los ateos explícitos positivos/fuertes (en la derecha) afirman que “a lo menos existe una deidad” es una afirmación falsa. Los ateos explícitos negativos/débiles (en la derecha) rechazan o rehúyen la creencia que existe alguna deidad, sin afirmar explícitamente que «a lo menos una deidad existe» es falso. Los ateos implícitos negativos/débiles (en la izquierda) incluyen a personas que no creen en una deidad, pero no han rechazado conscientemente tal creencia: niños pequeños, personas que no han sido expuestas a ideas teístas y algunos agnósticos. Los tamaños en el diagrama no indican los tamaños relativos dentro de una población.

Positivo vs. Negativo

Filósofos como Antony Flew y Michael Martin han diferenciado el ateísmo positivo (fuerte) con el ateísmo negativo (débil). El ateísmo positivo es la afirmación consciente que los dioses no existen. El ateísmo negativo incluye todas las otras formas del no-teísmo. De acuerdo a esta clasificación, quienquiera que no sea teísta es un ateo negativo o positivo. Los términos fuerte y débil son relativamente recientes, mientras que los términos positivo y negativo tienen un origen anterior y se han usado (de maneras ligeramente diferentes) en la literatura filosófica y en apologéticas católicas. Bajo esta división del ateísmo, la mayoría de los agnósticos serían ateos negativos.

Mientras que hay quienes afirman, como Michael Martin, que el agnosticismo implica un ateísmo negativo, varios agnósticos consideran que su postura es distinta al ateísmo, pues pueden considerar a este último no más justificado que el teísmo o que requiere de igual convicción. La declaración que el conocimiento, ya sea a favor o en contra, de la existencia de los dioses es inalcanzable, se entiende a veces con la implicación que el ateísmo también requiere un salto de fe. Las respuestas comunes incluyen que las proposiciones religiosas no demostradas merecen tanta incredulidad como todas las proposiciones sin pruebas y que la improbabilidad de la existencia divina no implica que la posibilidad contraria tenga la misma probabilidad de ser cierta. El filósofo escocés J. J. C. Smart argumentó que “en ocasiones una persona auténticamente atea puede describirse a sí misma, incluso apasionadamente, como agnóstica debido a la generalización irracional del escepticismo filosófico que nos prohíbe decir que sabemos algo sobre cualquier cosa, a excepción quizás de las verdades de las matemáticas y la lógica formal”.

Para algunos ateos, como el filósofo Fernando Savater, el agnosticismo es una forma cobarde e inconsecuente de ateísmo. Por consiguiente, algunos autores ateos como Richard Dawkins prefieren diferenciar a las posturas teístas, ateas y agnósticas de acuerdo a su posición dentro de un espectro de probabilidad teísta, es decir, la probabilidad de verdad que cada quien asigna a la afirmación “Dios existe”. En lo personal se declara “agnóstico en la misma medida en que lo soy respecto de las hadas en el fondo del jardín”.

La palabra ateo en griego
La palabra griega αθεοι (atheoi), tal y como aparece en la Epístola a los efesios (2:12) del papiro 46 de comienzos del siglo III. Por lo general, traducida como “aquellos sin Dios”

Definición como imposible o transitorio

Anterior al siglo XVIII, la existencia de Dios se aceptaba tan universalmente en el mundo occidental que incluso se cuestionaba la posibilidad del ateísmo auténtico. Bajo el contexto del innatismo teísta, la idea de que todas las personas creen en Dios desde el nacimiento, estaba la connotación de que los ateos simplemente eran teístas en negación.

Además existe la creencia de que los ateos rápidamente creen en Dios en momentos de crisis, se convierten in artículo mortis (justo antes de morir) o que “no hay ateos en las trincheras”. Sin embargo, han existido contraejemplos, entre ellos casos de ateos literalmente en las trincheras.

Incluso se ha cuestionado la necesidad de la palabra ateísmo:

“”De hecho, ateísmo es un término que no debería existir. Absolutamente nadie necesita identificarse a sí mismo como un «no-astrólogo» o «no-alquimista». No tenemos palabras para las personas que dudan que Elvis aún vive o que los alienígenas han cruzado la galaxia solo para molestar granjeros y sus ganados. El ateísmo no es nada más que los ruidos que las personas sensatas manifiestan en la presencia de creencias religiosas injustificadas”. (Carta a una nación cristiana, Sam Harris)

Peligros de la religión

"Los Cuatro Jinetes" del ateismo

Algunos ateos prominentes, recientemente Christopher Hitchens, Daniel Dennett, Sam Harris y Richard Dawkins, precedidos por pensadores como Bertrand Russell, Robert G. Ingersoll, Voltaire y el novelista José Saramago, han criticado las religiones denunciando aspectos nocivos de las prácticas y doctrinas religiosas.

Karl Marx escribió: “La miseria religiosa es a la vez la expresión de la miseria real y la protesta contra la miseria real. La religión es el suspiro de la criatura oprimida, el sentimiento de un mundo sin corazón, así como el espíritu de una situación sin alma. Es el opio del pueblo. Se necesita la abolición de la religión entendida como felicidad ilusoria del pueblo para que pueda darse su felicidad real. La exigencia de renunciar a las ilusiones sobre su condición es la exigencia de renunciar a una condición que necesita de ilusiones. La crítica a la religión es, por tanto, en germen, la crítica del valle de lágrimas, cuyo halo lo constituye la religión”. Vladimir Lenin dijo que “cada idea religiosa y cada idea de Dios es vileza indescriptible... del tipo más peligroso, 'contagio' de la clase más abominable. Millones de pecados, acciones asquerosas, actos de violencia y contagios biológicos... son por lejos menos peligrosos que la sutil y espiritual idea de Dios ataviado de los más inteligentes disfraces ideológicos”.

Existe correlación entre el fundamentalismo religioso, la religión extrínseca (cuando se fomenta la religión porque sirve a intereses ocultos), el autoritarismo, el dogmatismo y los prejuicios. Sam Harris critica la dependencia de la religión occidental de la autoridad divina, que ve como una guía hacia el autoritarismo y el dogmatismo. Se han utilizado estas razones junto a hechos históricos, tales como las Cruzadas, la Santa Inquisición, la caza de brujas y los numerosos atentados terroristas, como pruebas de los peligros de la religión y réplica a los supuestos efectos positivos de la creencia en la religión. Los creyentes contra argumentan diciendo que los regímenes que apoyaron al ateísmo, tales como la Unión Soviética, también fueron culpables de asesinatos en masa. En respuesta, ateos como Sam Harris y Richard Dawkins han manifestado que las atrocidades de Stalin no fueron influenciados por su ateísmo, sino el marxismo dogmático, y que si bien Stalin y Mao casualmente eran ateos, ellos no actuaron en el nombre del ateísmo; a diferencia de las primeras, que fueron justificadas por la religión

Nuevo ateísmo

A continuación veremos un debate entre un impulsador del nuevo Ateímo como es el científico y biólogo Richard Dawkins y el cardenal George Pell, quien es miembro del consejo de cardenales del Vaticano y quien se declara inocente de las acusaciones de pedofilia en su Australia natal, y enfrenta un juicio. El Papa Francisco le aceptó una excedencia para defenderse ante la jusitica.

El Nuevo ateísmo es un movimiento de algunos escritores ateos anglosajones de principios del siglo XXI que propugnan que “la religión no debería simplemente tolerarse, sino que debe ser contrarrestada, criticada y expuesta a la argumentación racional dondequiera que se manifieste su influencia”.

Usualmente se reconoce a Sam Harris, Daniel C. Dennett, Richard Dawkins, Victor J. Stenger y Christopher Hitchens como líderes del reciente movimiento, puesto que varios de sus libros superventas, publicados entre 2004 y 2007, conforman la base de la mayor parte del discurso del Nuevo ateísmo.
Este movimiento busca disociarse del ateísmo político de masas que ganó fuerza en varias naciones en el siglo XX. En sus libros, se ha señalado a los atentados motivados por la religión del 11-S y el éxito parcial de los intentos del Discovery Institute por cambiar en Estados Unidos el currículo escolar en ciencias e incluir ideas creacionistas, con el apoyo de George W. Bush en 2005, como muestras de la necesidad de avanzar hacia una sociedad atea.

Ateos. El mundo de los que no creen



Le invitamos cordialmente a leer nuestro libro: ¿Quién es Dios?
¡Gracias! por visitarnos, Vladimir y María Mercedes Gessen @DivanGessen @UnDiosUniversal

Fuentes: https://es.wikipedia.org/wiki/Ate%C3%ADsmo
https://www.youtube.com

Fotos: https://commons.wikimedia.org/wiki/Main_Page
https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Topando_con_torpezas_llenas_de_n...

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